Agentes federales de la División Delitos Tecnológicos realizaron tres allanamientos donde las víctimas eran empresarios rosarinos

El origen de la causa se dio mediante la denuncia recibida en la Unidad Fiscal Investigación y Juicio N° 4 de Rosario, a cargo del Dr. Matías Ocariz, efectuada por la empresa “Pampa Luna SRL”. La misma alertó sobre distintos hechos de movimientos bancarios desconocidos por empresas de dicha ciudad. Dicha firma detectó la salida de su cuenta la suma de cuatro millones de pesos y que este y otros tantos habían sido realizados irregularmente por un estudio contable rosarino (cuyos datos se encuentran en reserva judicial).

Con el avance de la investigación, la Fiscalía resolvió dar intervención a la dicha División. En consecuencia, los uniformados se abocaron a establecer la génesis de los hechos y de esta manera pudieron determinar que una contadora del estudio estafaba justamente a las empresas que administraba los fondos, desviando el dinero a cuentas de cómplices quienes retiraban presencialmente en varias entidades bancarias, algunas de ellas en la ciudad de Buenos Aires, quienes luego viajaban a Santa Fe y entregaban el efectivo.

En consecuencia y con el total de las pruebas obtenidas, desarticularon esta organización que en las sombras y desconocimiento de los empresarios, había orquestado mediante el reclutamiento de las denominadas “mulas”, el vaciamiento de sus fondos.

El detenido quedó alojado en la alcaidía como uno más de los imputados en la causa, aguardando su traslado para ser indagado.