Inteligencia artificial al servicio de la seguridad pública
Con la creación de la Unidad de Gestión “Lince”, el Gobierno de Santa Fe busca integrar inteligencia artificial y videovigilancia para mejorar la prevención y respuesta ante delitos. La medida fue oficializada mediante el Decreto N.º 2642/25, firmado por el gobernador Maximiliano Pullaro.
La provincia de Santa Fe dio un paso firme hacia la modernización de su sistema de seguridad con la puesta en marcha de la Unidad de Gestión “Lince”, un nuevo espacio que coordinará el uso de inteligencia artificial aplicada a la videovigilancia, el reconocimiento facial y la lectura automática de patentes.
El anuncio se concretó esta semana tras la firma del Decreto N.º 2642/25 por parte del gobernador Maximiliano Pullaro, quien destacó la necesidad de “conectar la tecnología con la gestión pública para cuidar mejor a los santafesinos”.
“Lince” dependerá de la Secretaría de Tecnologías para la Gestión, dentro del Ministerio de Gobierno e Innovación Pública, y trabajará en coordinación directa con el Ministerio de Justicia y Seguridad. Su tarea será operar los sistemas de monitoreo urbano, garantizar la seguridad de los datos y diseñar protocolos que permitan una respuesta más rápida ante hechos delictivos o emergencias.
Según el decreto, la nueva unidad no implicará nuevos cargos ni aumento del gasto público. El personal estará compuesto por agentes especializados que ya forman parte de distintas áreas estatales, ahora reunidos bajo una dirección unificada.
Ignacio Tabares, secretario de Tecnologías para la Gestión, explicó que el objetivo es “profesionalizar al personal y aprovechar las capacidades digitales existentes”, sumando control, eficiencia y transparencia. Además, la unidad aplicará métricas para medir su desempeño y asegurar resultados concretos en la gestión de la seguridad pública.
Esta iniciativa se enmarca en el programa Territorio 5.0, que impulsa la digitalización y modernización del Estado provincial.
Con la creación de “Lince”, Santa Fe apuesta a una seguridad apoyada en la inteligencia artificial y la tecnología, sin dejar de lado el factor humano. Una herramienta moderna para una vieja demanda: más prevención, más eficacia y una gestión estatal más inteligente.










