El Gobierno busca identificar a los autores de la balacera

Tras el ataque armado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez en Rosario, la Provincia y el Ministerio Público de la Acusación ofrecen una recompensa millonaria para quienes puedan aportar información clave. La causa avanza bajo secreto de sumario.

El pasado jueves por la tarde, el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA), uno de los principales centros de atención crítica de Rosario, fue blanco de un nuevo ataque a tiros. Aunque no se registraron víctimas ni heridos, el hecho volvió a encender las alarmas sobre rivalidades entre bandas narcos que operan en la ciudad

El ataque ocurrió un día después que fuera baleado el heredero al trono de Los Monos (Dylan Cantero) quien recibió el alta médica por la mañana, y se presume que podría estar vinculado justamente a este, dado que dejaron un mensaje que lo señalaba. Las cámaras de seguridad y pericias balísticas son ahora piezas claves en la investigación.

En esta ocasión no hubo personas heridas, pero el ataque generó conmoción entre el personal de salud, pacientes y familiares presentes. El miedo se mezcla con la frustración de quienes trabajan en una institución ya atravesada por el esfuerzo diario en contexto de emergencia sanitaria.

En respuesta, el Gobierno de Santa Fe, junto al Ministerio Público de la Acusación (MPA), anunció una recompensa de $12 millones para quien brinde información útil que permita identificar a los responsables del atentado. La medida fue confirmada por el gobernador Maximiliano Pullaro y el ministro de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, durante una conferencia de prensa brindada este viernes por la mañana.

Las autoridades solicitan que quienes posean datos se comuniquen con la Central de Emergencias 911 o escriban al correo recompensas@mpa.santafe.gov.ar, garantizando reserva de identidad para los aportantes.

El atentado contra el HECA, aunque sin víctimas directas, representa una grave amenaza a un símbolo del servicio público. La recompensa ofrecida busca romper el silencio y abrir una puerta a la justicia, en una ciudad que ya no puede darse el lujo de la indiferencia. La investigación sigue su curso bajo estricto secreto de sumario.