El operativo fue llevado adelante por agentes de Control municipal
Una denuncia por ruidos molestos derivó en un operativo de la Secretaría de Control municipal que permitió desarticular una fiesta clandestina este jueves por la mañana en una vivienda ubicada en Pasco al 5900, en la zona oeste de Rosario.
Agentes de la Dirección de Control de Proximidad se hicieron presentes en el lugar alrededor de las 8, tras el aviso de vecinos que reportaron música a alto volumen desde horas de la madrugada. Al ingresar al domicilio, un departamento interno, encontraron a unas 15 personas en plena reunión, junto a gran cantidad de botellas de alcohol distribuidas en el espacio.
La intervención se realizó de forma pacífica y no se registraron incidentes. Los presentes fueron desalojados sin resistencia, aunque ninguno se hizo responsable de la organización del encuentro ni del inmueble en cuestión, que quedó vacío luego del procedimiento.
“Recibimos la denuncia y acudimos de inmediato. Encontramos unas 15 personas, quienes fueron desalojadas rápidamente. Trabajamos a diario para mejorar la convivencia en la ciudad”, señaló Diego Herrera, secretario de Control municipal. El funcionario destacó la importancia de la participación ciudadana para detectar este tipo de actividades, que infringen la normativa vigente.
Finalmente, la vivienda fue clausurada por contravención. Desde el municipio reiteraron que se mantendrán los controles activos y reforzados en distintos puntos de la ciudad, sobre todo durante fines de semana y feriados, con el objetivo de prevenir situaciones similares.
El accionar de los agentes municipales permitió frenar una situación que afectaba la convivencia barrial. La denuncia de los vecinos fue clave, y el operativo refuerza el mensaje de que Rosario no tolera fiestas ilegales que perturban el descanso y violan las normativas.