Fue tras reordenan la feria de Dorrego y el río
Durante el fin de semana, agentes municipales y la Policía de Santa Fe realizaron un operativo en la costanera central para retirar puestos de venta no habilitados. La medida forma parte de un plan de reordenamiento del espacio público.
La Secretaría de Control municipal, en coordinación con efectivos de la Policía de Santa Fe, llevó adelante este sábado y domingo un operativo de fiscalización en la costanera central, más precisamente en la zona de calle Dorrego y el río. La intervención tuvo como objetivo principal liberar sectores ocupados por vendedores que no contaban con la habilitación correspondiente.
El operativo incluyó el desalojo de puestos que ofrecían productos sin elaboración propia —principalmente indumentaria de reventa—, además del retiro de estructuras como gazebos y la liberación de senderos peatonales y bancos públicos. También se realizaron controles en los puestos gastronómicos instalados en el área.
Según informaron desde la Secretaría de Control, se venían detectando irregularidades desde hace al menos dos meses, cuando comenzó un relevamiento a cada feriante. En muchos casos, se labraron actas de infracción y, en otros, se incautó mercadería. Algunos de los puesteros fueron derivados al área de Economía Social para iniciar un proceso de regularización.
Diego Herrera, secretario de Control y Convivencia, explicó: “En este sector todo comenzó como una feria de artesanos. Con el tiempo, aparecieron puestos que desvirtuaron ese espíritu. Lo que hicimos este fin de semana fue ordenar el espacio público y devolverle su función original”.
El operativo refleja la intención del municipio de garantizar el uso ordenado del espacio público, respetando tanto los derechos de los feriantes regulares como los de los vecinos y visitantes. La presencia del Estado busca equilibrar la actividad económica con la convivencia ciudadana.