Fue tras el crimen de Rafael Venialgo Acosta, cometido el 13 de enero de 2021 en Rosario

Los Jueces de Primera Instancia Lorena Aronne, Gonzalo López Quintana, y Carlos Leiva condenaron a Miguel Ángel Yaskievicz, de 46 años, a la pena de prisión perpetua este viernes tras finalizar el juicio.

Yaskievicz quien era policía en ese momento, fue hallado culpable de los delitos de homicidio doloso calificado, abusando de su función como policía, agravado por el uso de arma de fuego en carácter de autor, en concurso real con el delito de allanamiento ilegal, en carácter de coautor.

El hecho ocurrió cuando Yaskievicz y otro policía, Juan M, fueron comisionados a la zona de calle Patagones al 4100, donde había ocurrido un hecho de amenazas calificadas. Al llegar al lugar, ingresaron ilegalmente al domicilio de Venialgo Acosta, quien los esperaba con un machete. Yaskievicz disparó contra Acosta, quien murió a causa de las heridas. Juan M. fue condenado en un juicio abreviado a tres años de prisión de ejecución condicional por encubrimiento doblemente agravado por ser el hecho precedente especialmente grave y por ser funcionario público en concurso ideal con falsedad ideológica de documento público en carácter de autor, en concurso real con el delito de allanamiento ilegal, en carácter de coautor.

En el juicio, el fiscal Adrián Spelta de la Unidad de Homicidios Dolosos acreditó que Yaskievicz ingresó al domicilio de Venialgo Acosta sin orden judicial y sin identificarse como policía. También demostró que el acusado disparó contra la víctima sin mediar provocación alguna.

La defensa de Yaskievicz a cargo del abogado Luis Arguelles, alegó que el policía actuó en defensa propia. Sin embargo, el tribunal consideró que no tuvo motivos para disparar contra Acosta, quien se encontraba desarmado y no representaba una amenaza.

La condena de Yaskievicz a prisión perpetua es un mensaje claro de que la justicia no tolerará la violencia policial.