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Clausura de chatarrerías en Rosario

El municipio cerró dos locales más y ya suma 51 sanciones en 2025

Los operativos se realizaron en la zona sur de la ciudad. También se radicaron 26 denuncias penales por violar clausuras previas. Los controles apuntan a frenar el robo de cables y metales. La Municipalidad de Rosario clausuró dos chatarrerías el viernes pasado en la zona sur de la ciudad, en Santa Rosa de Lima al 200 y Medici al 4700. Las intervenciones se concretaron durante operativos conjuntos con la Policía de Santa Fe y se enmarcan en un plan de control sostenido para verificar la legalidad de estos comercios y la procedencia del material acopiado. Con estas medidas, ya son 51 las sanciones aplicadas en lo que va de 2025.

Las clausuras se realizaron tras constatar irregularidades en el funcionamiento de ambos locales. En paralelo, la Secretaría de Control municipal informó que 26 chatarrerías fueron denunciadas penalmente este año por desobedecer clausuras anteriores y continuar operando pese a la faja de cierre impuesta por la autoridad.

Los procedimientos se llevaron adelante el viernes, durante inspecciones programadas en el distrito sur. Participaron agentes de las Direcciones Generales de Inspección de Comercio, Industria y Servicios, Control Urbano y efectivos de la Policía provincial.

El municipio verificó las condiciones de habilitación, seguridad e higiene, mientras que la fuerza de seguridad controló la procedencia del material, uno de los ejes centrales del operativo. Según fuentes oficiales, las clausuras se dispusieron al detectar incumplimientos graves de la normativa vigente.

Desde el inicio de 2025 se registraron 51 intervenciones, que incluyen 15 clausuras y 36 reimplantes. Además, se formalizaron 26 denuncias penales contra responsables de locales que violaron al menos una clausura previa.

La presentación judicial se realiza cuando los inspectores comprueban que el comercio volvió a funcionar tras retirar la faja colocada por la Municipalidad. Este accionar constituye una desobediencia a la autoridad, tipificada en el Código Penal.

El secretario de Control municipal, Diego Herrera, destacó el impacto de estas medidas. “Este 2025 continuamos controlando de cerca a estos comercios y trabajando en conjunto con la Policía. Desde que comenzaron los operativos hubo una baja de hasta el 93% en el robo de cables y del 86% en metales, además de medidores de agua”, afirmó.

Herrera agregó que se recuperó material del alumbrado público y que estas acciones apuntan a reducir el vandalismo cotidiano. “Como nos pide el intendente Pablo Javkin, vamos a seguir en este camino”, subrayó.

Durante 2024, los operativos permitieron secuestrar más de 20 toneladas de materiales de dudosa procedencia. En ese período también se concretó la detención de 31 personas vinculadas a estos establecimientos y se presentaron 25 denuncias penales ante la Justicia.

El funcionario remarcó que el objetivo es atacar el segundo eslabón de la cadena delictiva. “Le pegamos a quienes compran lo robado para luego venderlo. Los resultados ya están a la vista”, explicó Herrera, quien también señaló que muchos locales presentaban instalaciones edilicias y eléctricas precarias.

El refuerzo de los controles se consolidó a partir de febrero del año pasado, tras la firma de un convenio marco entre el municipio y el gobierno provincial. El acuerdo busca prevenir delitos vinculados a la sustracción de cobre, materiales ferrosos y automotores.

Actualmente, las clausuras continúan vigentes y las denuncias penales siguen su curso en la Justicia. Desde el Ejecutivo local anticiparon que los operativos seguirán de forma sostenida en todos los distritos de la ciudad

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