Cuatro jóvenes fueron detenidos tras escapar de la policía y colisionar con un utilitario

Una peligrosa persecución policial culminó este viernes antes del mediodía en la intersección de Grandoli y Uriburu, donde cuatro jóvenes fueron detenidos y una Toyota Hilux terminó secuestrada. El operativo se activó luego de que la Central de Emergencias del 911 recibiera una llamada alertando sobre un vehículo que circulaba realizando maniobras riesgosas.

Según fuentes oficiales, cuando los agentes llegaron a la zona identificaron a una camioneta con las características informadas. Al intentar interceptarla, el conductor aceleró bruscamente para evadir el control, desoyendo en repetidas oportunidades las órdenes de detenerse.

La persecución se extendió por varias cuadras en dirección oeste por calle Uriburu. En su intento de fuga, el vehículo colisionó contra una Renault Kangoo blanca en la intersección con España, ocasionando daños materiales y poniendo en riesgo a otros conductores y peatones. Finalmente, la camioneta pudo ser interceptada en Uriburu y Santiago, donde los efectivos lograron reducir a sus ocupantes.

En el procedimiento fueron arrestados Franco D., Soledad A. y Lautaro M., todos de 19 años, junto a Rocío S., de 20. El test de alcoholemia practicado al conductor arrojó 1,02 g/l, una cifra que supera ampliamente el límite permitido, especialmente teniendo en cuenta que en la provincia rige la normativa de Alcohol Cero. Además trascendió que el test de narcolemia también habría dado positivo.

La policía solicitó la presencia del servicio de emergencias y del área municipal de Tránsito para constatar los daños ocasionados y asistir a los involucrados. Tanto los jóvenes como el rodado fueron trasladados a la Comisaría 21º. El dueño de la pick up se hizo presente, aludiendo que su hijo habría pedido el rodado anoche para ir a jugar al fútbol y que no habría regresado. Un acto de total irresponsabilidad por parte del adulto mayor, donde la justicia debería actuar y hacerlo responsable de los actos

De acuerdo con voceros del caso, los detenidos enfrentarán cargos por desobediencia, lesiones y daños, a la espera de la intervención judicial correspondiente. “La rápida actuación policial evitó un accidente de mayor gravedad y permitió la detención de los responsables”, señalaron fuentes oficiales.

El operativo se enmarca en los controles de tránsito y seguridad vial que se vienen intensificando en diversos puntos de la ciudad, ante el incremento de incidentes relacionados con la conducción imprudente. La zona de Grandoli y Uriburu, en particular, registra un historial de maniobras peligrosas y colisiones menores reportadas por vecinos y automovilistas.