Sospechada de balear su propia casa, hoy la Justicia ordenó su detención por el ataque a balazos ocurrido en mayo en barrio Tablada

Sospechan que organizó el hecho para desviar otra investigación. También hay un pedido de captura para un barra vinculado a Newell’s y Central.

Una historia que da un giro inesperado

Norma Acosta fue detenida este jueves en Rosario, por orden del fiscal Pablo Socca, en el marco de una investigación que busca esclarecer la balacera ocurrida el 8 de mayo contra su vivienda, ubicada en Larguía al 3400, en barrio Tablada. En un giro llamativo del caso, la principal hipótesis apunta a que la propia Acosta fue quien organizó el ataque.

En un comienzo, la mujer —ya conocida en el ámbito judicial— atribuyó los disparos a represalias tras denunciar en redes una presunta trama de corrupción policial. Sin embargo, las pruebas recolectadas en la causa contradicen esa versión. Cámaras de seguridad, testigos y evidencia técnica apuntan a una maniobra orquestada para simular un atentado.

Víctimas o ejecutores

El ataque fue ejecutado por dos jóvenes en bicicleta. Uno disparó cinco veces contra la fachada y le entregó el arma a su cómplice antes de huir. A los pocos minutos, un menor de 17 años fue detenido con un arma calibre 9 mm. Horas después cayó el segundo implicado, de 18 años. Ambos habrían actuado bajo órdenes de Nahuel “Monta” Depetris, un presunto integrante de la barra de Newell’s, ya detenido.

Intervención oficial y una línea de investigación compleja

El fiscal Socca ordenó además la captura de Juan José “Jota Jota” Gómez, con conexiones en las barras bravas de Newell’s y Rosario Central. La pesquisa también investiga a Acosta por falso testimonio: en su primera declaración, afirmó que los atacantes iban en un Volkswagen Voyage, relato que los peritajes desmintieron.

El ministro de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, respaldó la investigación y calificó el caso como “una trama criminal en cabeza de la propia supuesta víctima”. Además, criticó a medios que dieron espacio a declaraciones previas de Acosta: “Ahora la situación deja de ser una elucubración y pasa al terreno penal, que es donde debe estar”.

La detención de Norma Acosta cambia por completo el eje del caso. Lo que parecía un intento de silenciar una denuncia, ahora aparece como un armado con fines oscuros. La Justicia deberá determinar responsabilidades, pero el giro ya está en marcha: la denunciante pasó a ser la principal sospechosa.