A uno lo golpearon y dejaron herido
La madrugada de este viernes fue especialmente violenta para dos taxistas en Rosario, si bien, los delitos disminuyeron mucho, este fin de semana, se registraron al menos dos casos, quienes fueron víctimas de asaltos mientras realizaban su trabajo en diferentes puntos de la ciudad. Uno de estos hechos ocurrió a las 7, en la zona de Provincias Unidas 100 Bis, donde un taxista, fue abordado por delincuentes que le sustrajeron sus pertenencias y dinero en efectivo. El robo fue tan rápido como violento, dejando al trabajador con pocas opciones para reaccionar, mientras que los responsables huyeron sin ser identificados, a pesar de que la policía se encontraba en la zona realizando patrullajes.
Sin embargo, el segundo asalto fue aún más violento y peligroso para otro taxista, quien vivió una experiencia aterradora en la zona de Nuevo Alberdi, al norte de la ciudad. Según el relato del conductor, quien luego de la experiencia acudió a la policía, el hecho comenzó cuando lo abordan en Oroño y Balcarce, donde el hombre, aparentemente de una zona más tranquila, fue abordado por una chica y al llegar a destino, lo aguardaban dos hombres que se le cruzaron en su camino. “Los negros que salen ahí, te van a matar si no le das la plata”, así contaba el taxista, que su pasajera le decía. Lo interceptaron tres individuos y le exigieron que entregara todo lo que tenía. Otros dos hombres más, llagaron al lugar y uno de ellos rompió el vidrio del auto, lo que aumentó aún más el temor del taxista. Mientras los asaltantes lo intimidaban, le ordenaron que les diera todas sus pertenencias porque “estaban recalzados”, refiriéndose a su supuesta peligrosidad y lo golpearon en el rostro, lesionándolo. Afortunadamente, el taxista logró escapar sin ser gravemente herido, pero la experiencia dejó claro el creciente clima de violencia que se vive en algunas zonas de la ciudad.
A pesar de que en el momento del robo se encontraban patrulleros cercanos, la intervención de las fuerzas de seguridad no fue suficiente para evitar el asalto. La policía llegó al lugar con la ambulancia en camino, pero no pudieron evitar la fuga de los delincuentes.
Los taxistas, como se vio en estos dos casos, continúan siendo víctimas frecuentes de robos y agresiones, aunque estos delitos habían disminuido, las alertas en seguridad se encendieron nuevamente
