La extraña historia de un paraguayo que atravesó varias fronteras, herido, sin que nadie se percate, para morir en Rosario

Para muestra falta un botón dicen el dicho y vaya, si lo es este caso. El lunes pasado en horas de la mañana ingresa al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA) un hombre de nacionalidad paraguaya con una herida por arma de fuego con orificio de entrada en el cuello y salida en el cráneo. Estuvo internado hasta este viernes, por la tarde, cuando se produzco el deceso. Según reza en su identificación, la cual investigan si es la real o es apócrifa, se llamaría Ricardo Galeano y tendría 41 años, además sería oriundo de Ciudad del Este en Paraguay, donde se habría producido el extraño episodio, en el que resulta herido, sobre el kilómetro 7 y Monday, esto enmarcado legalmente por la denuncia de los familiares que lo trasladaron desde el país en cuestión, hasta el nosocomio rosarino

Más extraño aún y que le cuesta dilucidar a la Dra Marisol Fabbro, de la Unidad de Homicidios Dolosos, es saber como hizo para atravesar, la frontera del país en ese estado, con lo que respecta al paso fronterizo y ADUANAS, luego los peajes y controles establecidos a lo largo de los más de mil kilómetros que separan las localidades y atravesando por más de 15 horas tres provincias, para llegar a Rosario.

Si bien habrían logrado establecer que el ataque se produjo en Paraguay, no sería jurisdicción local y el caso quedaría en manos del Dr. Luis Trinidad, Fiscal de la Unidad Nº4 del Ministerio Público del Paraguay

Cabe resaltar que no está aclarada la identidad del cuerpo, varios fueron los familiares que se trasladaron con este, hasta el nosocomio, algunos con residencia en el sur bonaerense, otros con domicilio en Rosario. También trascendió que la víctima había ingresado a un efector de salud de la ciudad de Asunción en el Paraguay, pero al no contar con los medios económicos para solventar la intervención, decidieron firmar el alta voluntaria y trasladarlo hasta el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA) por sus propios medios, llegando muy gravemente herido y falleciendo luego