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Persecuciones, lesiones y armas de guerra

Dos operativos que terminaron con aprehendidos

Un hombre fue atacado en la vía pública y otro intento de fuga derivó en el secuestro de un arma de alto calibre. Dos procedimientos distintos, la misma señal de alerta: armas circulando en las calles.

Un violento episodio ocurrido este sábado en inmediaciones de Río de Janeiro y Chancay terminó con un hombre lesionado, dos aprehendidos y el secuestro de una pistola semiautomática calibre de guerra. El llamado a la Policía surgió de un vecino que alertó sobre un hombre tendido en la calle. Al llegar, los agentes entrevistaron a Pablo Z de 51 años, quien, aún dolorido y visiblemente nervioso, relató que había sido seguido por una Toyota Hilux blanca. Según su testimonio, el conductor lo habría interceptado y luego agredido con un arma blanca. Señaló al atacante como “Jorge”.

Con esa información, las unidades iniciaron un rápido patrullaje. Minutos después, en Comisaría 19º, se encontraba Jorge Omar K., el hombre señalado por la víctima. Fue aprehendido y, consultado por los uniformados, indicó el lugar donde habría abandonado la camioneta involucrada.

El rodado fue localizado en Marítimo y Pasaje Rodríguez. Al aproximarse, apareció otro hombre, quien desobedeció la voz de alto e ingresó a una vivienda de Pasaje 1827 al 5900. Allí, en presencia de la propietaria de la vivienda, confesó portar una cuchilla y luego reconoció poseer un arma de fuego.

Con autorización de la dueña de casa, el personal ingresó y secuestró una pistola semiautomática, dos cargadores y 16 cartuchos. La Fiscalía, a cargo de la Dra. Ballari, ordenó la aprehensión correspondiente y el traslado del procedimiento a Comisaría 32º.
La víctima fue asistida y se encuentra fuera de peligro.

Momentos antes, en Francia y Caseros, personal de la Brigada Motorizada, , detectó un Volkswagen Golf gris en actitud sospechosa sobre. Al advertir la presencia policial, el conductor aceleró. Los agentes lograron interceptarlo a pocos metros.

En la requisa, el conductor, Marcelo Gabriel A de 37 años, llevaba una riñonera con una pistola Taurus G3 calibre 9×19 mm, acompañada de 15 municiones. El cargador, de 17 disparos, estaba dentro del vehículo. Si bien exhibió una cédula de legítimo usuario, no contaba con autorización de portación. Junto a él viajaba otro sujeto de 35 años, también aprehendido.

El vehículo y la documentación fueron secuestrados conforme al protocolo. La Fiscalía dispuso las medidas de rigor.

Los dos operativos, ocurridos con pocas horas de diferencia, exponen una preocupación creciente: la proliferación de armas —legales e ilegales— en manos de civiles que circulan por las calles rosarinas.

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