/Prisión perpetua para cuatro imputados por los crímenes de Claudia Deldebbio y Virginia Ferreyra

Prisión perpetua para cuatro imputados por los crímenes de Claudia Deldebbio y Virginia Ferreyra

Hay dos sujetos que aún permanecen prófugo y que habrían tendido participación. Sobre estos hay una recompensa vigente para quienes aporten información

Este lunes en el Centro de Justicia Penal de Rosario condenaron a René Daniel Ungaro, Nicolás Alberto Martínez, Fernando David Cortez y Lautaro José Cortez a la pena de prisión perpetua por el doble homicidio de Claudia Mercedes Deldebbio y Virginia Soledad Ferreyra, ocurrido en julio de 2022. El fallo fue dictado en la sala 10 por los jueces de Primera Instancia Alejandro Negroni, Facundo Becerra y Gonzalo López Quintana, tras un juicio oral.

La sentencia alcanzó a los cuatro acusados por homicidio calificado cometido mediante el uso de armas de fuego, con concurso premeditado de personas y motivado por un precio o promesa remuneratoria. El tribunal también tuvo por acreditadas tentativas de homicidio, hechos de abuso de armas e intimidación pública, en función de otros ataques investigados y juzgados en el mismo proceso.

Según la acusación sostenida por los fiscales Patricio Saldutti y Franco Carbone, el hecho principal ocurrió el 23 de julio de 2022, cerca de las 19, en la intersección de Maestros Santafecinos e Isola, en Rosario. En ese lugar, personas armadas dispararon contra la Torre 11 y contra quienes aguardaban en una parada de colectivos cercana. Como consecuencia del ataque, Claudia Deldebbio falleció en el lugar, mientras que su hija Virginia Ferreyra murió semanas después a raíz de las heridas sufridas. En el mismo episodio resultó herido un menor de edad.

La investigación determinó que el plan fue instigado desde el interior de establecimientos penitenciarios. René Daniel Ungaro, alojado en el Complejo Penitenciario Federal de Ezeiza, ordenó la ejecución del ataque y transmitió la instrucción a Nicolás Alberto Martínez, detenido en la cárcel de Coronda. A partir de esa orden, Martínez organizó la logística y contactó a Fernando David Cortez y a su hijo, Lautaro José, quienes participaron como autores materiales junto a otros integrantes aún no identificados.

El día del ataque, los agresores arribaron al lugar en un Peugeot 308 negro, conducido por Fernando David Cortez. Desde el vehículo descendieron personas armadas que efectuaron múltiples disparos tanto contra el edificio como contra transeúntes y personas que esperaban el colectivo. Tras el ataque, los ocupantes huyeron del lugar.

El tribunal también evaluó hechos conexos, entre ellos un ataque armado contra el Centro Municipal Distrito Sur “Rosa Ziperovich”, ocurrido el 4 de septiembre de 2022. Según la acusación, esa balacera fue ordenada por Ungaro desde prisión y ejecutada por Fernando David Cortez, con el objetivo de generar intimidación pública. Durante la investigación se secuestraron armas de fuego de uso de guerra, municiones y otros elementos vinculados a los hechos.

En relación con la prueba, los fiscales destacaron la importancia de intervenciones telefónicas, pericias a teléfonos celulares y declaraciones testimoniales que permitieron reconstruir la cadena de instigación y la participación de cada imputado. “La fiscalía está satisfecha con el fallo. Es el resultado de una investigación compleja y prolongada, que demandó muchos esfuerzos y permitió reunir la prueba necesaria para arribar a esta condena”, señalaron Saldutti y Carbone tras conocerse la sentencia.

Los representantes del Ministerio Público de la Acusación también remarcaron que los ataques tuvieron como finalidad generar temor y conmoción pública, seleccionando objetivos al azar en espacios de circulación cotidiana. Indicaron además que la investigación continúa abierta para dar con dos personas más que habrían participado en el ataque y que permanecen prófugas, por quienes se mantiene vigente una recompensa ofrecida por el Ministerio de Justicia y Seguridad.

Con el fallo de este lunes, los cuatro acusados recibieron la pena máxima prevista por el Código Penal, quedando firme en primera instancia la condena por uno de los hechos más graves juzgados en los últimos años en Rosario.

Compartir