Réplicas de armas y fuga tras posibles detonaciones en la madrugada rosarina

En menos de diez horas, la policía intervino en dos situaciones distintas: un hombre detenido con rifles de aire comprimido y cuatro jóvenes aprehendidos tras una persecución vinculada a presuntos disparos al aire.

El primero de los procedimientos ocurrió este viernes a las 19 en inmediaciones de calle de los Indios y Estudiante de Aguilar. Una patrulla fue comisionada al lugar tras un aviso a la Central de Emergencias del 911, que daba cuenta sobre un hombre portando armas de fuego. Al llegar, los agentes identificaron al sospechoso, Jorge Ezequiel G de 28 años, quien llevaba consigo dos rifles de aire comprimido calibre 5.5, tres cajas metálicas con balines de acero, un binocular y un celular.

Los uniformados procedieron a su aprehensión y al secuestro de todo el material, que se encontraba a simple vista. Aunque se trataba de réplicas de armas, la presencia de los elementos y el alerta vecinal motivaron el traslado del procedimiento a la Comisaría 32º para continuar las actuaciones de rigor.

En la madrugada del sábado, otro llamado al 911 informó detonaciones en la zona de Carranza y Derqui, donde estaría implicado un automóvil oscuro. Tras un patrullaje, los oficiales localizaron un vehículo con las mismas características en Mendoza y colectora José M. Rosas.
Pese a las señales lumínicas y la voz de alto, el conductor se dio a la fuga, iniciando un recorrido que culminó dentro de un complejo FONAVI. Allí, los ocupantes descartaron un objeto similar a un arma antes de ser interceptados.

Los cuatro jóvenes fueron identificados como Agustina G. (20), Kiara B. (20), Santiago Z. (18) e Iván D. (22). En el rastrillaje posterior, los agentes hallaron una pistola de aire comprimido y secuestraron un Suzuki Fun, cuatro IPhone y $103.300 en efectivo. Fiscalía de Flagrancia solicitó la intervención de la PDI para la realización de dermo-test.

Minutos antes, vecinos de Carranza al 900 habían denunciado disparos contra una vivienda, aunque luego afirmaron que los tiros habrían sido al aire. No se registraron heridos ni daños, y no se hallaron vainas ni elementos balísticos.

Ambos operativos dejaron como saldo el secuestro de réplicas de armas, dinero y teléfonos, además de cinco aprehendidos. Las actuaciones continúan bajo supervisión fiscal mientras se intenta establecer si existió un uso real de armas o si se trató de maniobras intimidatorias.